Para el sistema sanitario general: los antibióticos existentes se vuelven ineficaces y hay que investigar nuevos fármacos. Desafortunadamente, desde los años 80 no se han desarrollado nuevas categorías de antibióticos porque las enfermedades infecciosas pueden tratarse ahora con antibióticos y no se necesitan nuevos fármacos. La resistencia a los antibióticos está apareciendo hoy en día debido al aumento en la automedicación; ya que el desarrollo de nuevos fármacos es un proceso que requiere años, se podrían necesitar 10 años más antes de que tengamos nuevos antibióticos para atacar las bacterias resistentes.
La resistencia a los antibióticos es la razón por la que es importante tomar estos medicamentos solo en las ocasiones y formas que prescriba el médico. No todas las infecciones pueden tratarse con antibióticos y no todos los antibióticos funcionan con todas las infecciones. Además, en muchos casos una infección bacteriana leve se sanará por sí sola sin necesidad de antibióticos.